- Tío, tengo 30 años y creo que he perdido la oportunidad de conseguir algo grande en la vida
- Ya ves tío, tengo 28 y no se qué hacer con mi vida
- Creo que si me hubiese implicado podría haber sido Messi o algo así
- Y yo Nicole Kidman
Sí. Esa será la respuesta de mucha gente, seguida de los siguientes argumentos:
- Ya no me apetece salir como antes. Este personaje probablemente te lo encuentres ese mismo fin de semana hasta el ojete de alcohol, luchando por respirar en su esquina más a mano.
- No os comportéis como críos de 15 años que ya rozamos los 30. Con este, dentro de unos días, tendrás problemas porque no has querido acompañarle a devolver sus sábanas de Star Wars.
- Las consolas son para los críos. Haz una prueba con éste, invítalo a un campeonato de Fifa ese fin de semana a ver que pasa. Si estamos hablando del primer personaje, prueba que sea un martes.
- Y el que viene al caso, los juguetes son para los niños. Ahí puedo estar de acuerdo... hasta ahora. Ved este vídeo sin que te den ganas de acercarte al Toysrus. A disfrutar.
En los albores de la tempestad vuelvo a vosotros. Vuelvo porque creo que me necesitáis.
Vengo a deciros que sonriáis, sé que es difícil, que estamos en una época jodida (si aún resides en The Corrupt World). Pero la sonrisa es algo que jamás podrán quitaros, por mucho que lo intenten; que manda cojones que lo están intentando.
Para ilustrar ésto y para vuestro regocijo, os dejo un corto que me ha mostrado hoy mi compañero PP en una formación que ha podido ser peor y él la ha hecho más amena.