Recovery

Desde el día que me quitaron mi gimnasio para montar un supermercado (tiene cojones la cosa), mi estado de forma ha ido pasando altibajos.

Cuando entrenaba en la pretemporada para el peor equipo de la historia llamado C.D.Infante, incluso peor que la época de CDK El Puntal, me lesioné en una jugada en que intentaba imitar el maravilloso regate de Figo, produciéndome una esguince de segundo grado en el tobillo izquierdo que me mantuvo casi un mes sin poder hacer un pijo más otros tantos pudiendo hacerlo pero de manera ortopédica y, gracias a los "maravillosos" cuidados de la Seguridad Social, me ha quedado tal secuela que si juego al fútbol sin tobillera lo más probable es que el pie vaya a su bola y se recalque el esguince.

Nuevamente, cuando gozaba de uno de mis momentos de subidón físico, nueva lesión. Esta vez, el estar en todo lo mío, me llevó a jugar 2 partidos en un mismo día, con un par. Podría haberlo aguantado perfectamente si no llega a ser que el segundo fuera contra los escavadores, compañeros de Joa. El pie puesto en mitad de un disparo y ¡zasca! una esguince one more time, esta vez en el pie derecho ¡si señor! Gracias a un médico competente, en esta ocasión si me escayolaron la pierna y la recuperación fué mejor, aunque no se redujeron precisamente los tiempos y nuevamente se pierde la forma.

Y a finales de 2008 cuando el salir a correr empezaba a dar sus frutos, permitiéndome correr en un partido sin cansarme lo más mínimo, tiro de animal-Manolo y el dedo gordo hecho carboncillo, ésto+el frío+los exámenes y otra vez hecho una porquería.

Pero ahora, vuelvo a las andadas, salir a correr y quién sabe si unos cuantos abdominales y pesas in my house, volveré por mis fueros, quién sabe que nueva lesión me depara el futuro...

Una muestra de como estaba mi pernil en el momento que me escayolaron la segunda esguince. Cuidao con el detalle de las muletas de fondo, no sirvieron para que el hijo de la gran perra de Cuenca se apiadase de mí en la práctica de SS.OO